Como hemos hecho con las otras entrevistas buscamos no lo grande, si no aquellos pequeños emprendimientos con la lucha del día a día.

vaca

¿Empezamos Ana María?

¿Como nació el emprendimiento?

Nació por el gran apego, cariño a los animales, en realidad no sé como describirlo.

Me crié junto a mis padres y hermana en un campito pequeño y aprendí todas las tareas junto a mis padres. Cuando formé mi propia familia trabajé en varios establecimientos rurales. Pasaron los años y con el trabajo del grupo familiar se pudo comprar el predio que hoy se denomina ‘’GRANJA LOS MILAGROS’’5 abril, 1988.

Mis padres me regalaron una vaca con su ternerita, pues yo siempre tuve la esperanza de tener mis propios animales. Luego se fueron comprando terneras recién nacidas a un tambo vecino, pero de a poco, eran, épocas difíciles……4 niños pequeños, el rancho era casi una tapera y había mucho para hacer, pero yo  me había propuesto esa meta, tener una pequeña granja, especialmente pensado en el crecimiento de mis hijos, y como medio de vida también.

Desde la fecha antes mencionada hasta el 2004’’ estuvo el padre de mis hijos acompañando  y ayudando en éste proyecto, pero bueno…….el hombre tomó otros rumbos, de ahí seguí sola hasta el día de la fecha y hasta que Dios disponga.

Mis hijos crecieron, ya cada uno está en lo suyo, creo haber hecho lo mejor como madre, mezclando todos los roles que con fe  y ganas todo se logra. Aclaro que quise tener pocos animales para atenderlos lo mejor posible, hoy tengo doce, en los que incluyen cinco lecheras, dos vaquillonas, cuatro terneros y un torito, todos nacidos y criados en el establecimiento.

rodo

Cuéntanos acerca del establecimiento 

El rancho tiene alrededor de 100 años, según los primeros pobladores de  JOSÉ ENRIQUE RODÓ, eran muchas cuadras de campo que se destinaban a la plantación de viñas, y el galpón  bastante grande era la bodega, aún hoy tiene las piletas donde trituraban las uvas y parte de un eje que hacía mover el invento de los italianos. Ahora lo uso como galpón, para ración, etc etc. El lugar de ordeñe es sencilla nomás ´al principio se ordeñaba a mano, en el 1998´se compró una máquina de ordeñar, de dos órganos, usada pero bien cuidada y fue instalada en el 2000´pues para todo se necesita dinero, y hasta la fecha ésta funcionando. Con el agua de pozo lavo piso y paredes y con agua de OSE máquina, tacho y todo lo referente al queso.

queso

¿Ha sido fácil comenzar y que haces con la producción?

Buena pregunta, no fue fácil y más aún cuando se llega a un pueblo donde no se conoce, me di cuenta que me enfrentaba a un gran desafío. Porque aquí miden a las personas por sus bienes y no por sus valores, mis hijos a veces se negaban concurrir a la escuela porque los hacían sentir diferentes.

Con respecto a lo que produzco, tengo un reparto de leche desde hace 26 años, mis hijos lo hicieron también, primero a pie, después en una bicicleta con una cartita que debían compartirla, lindas cosas de la niñez……..en el 2004 compré una moto y de cuatro litros de leche que vendía fui pasando despacito hasta 25 ‘o 30 en la actualidad.

En épocas buenas de pastura con el excedente de leche elaboro queso fresco y me gusta mucho esa tarea. Hay altas y bajas como en todo lo importante es saber administrarse para mantenerse en pie. Además tengo gallinas y vendo huevos.

¿A pesar de los desafíos que es lo lindo del emprendimiento?

Personalmente, me siento agradecida a Dios, por haberme ayudado a lograr mis  metas, mis sueños……quizás muchos no lo entiendan, pero gracias a todo lo antes mencionado tengo un techo donde vivir, un plato de comida todos los días, mis hijos están bien, con defectos y virtudes como yo, pero cada uno eligió su camino, hubo por ahí alguien que me dijo que estaba equivocada, que estaba enferma, pero el tiempo dijo lo contrario, ojalá que hayan muchas personas que puedan tener una vida digna en un pedacito de campo, obvio si les gusta, pues el ser tambero es de todos los días……no hay feriados, pero yo me siento muy bien siendo tambera o lechera como me llaman en mi pueblo.

Muchas gracias Ana María por haber compartido una parte de tu vida.